EL RETO

La piel es la suave cubierta exterior de nuestro cuerpo, el mayor órgano del sistema tegumentario, es decir, el mayor de los órganos destinados a proteger nuestro cuerpo de diversos tipos de daños. Sirve de amortiguador, protector de los tejidos más profundos, de la pérdida de agua (deshidratación), regulador de la temperatura y excretor de desechos. Como el tejado de una casa, es el refugio de nuestro cuerpo. 

Las fragancias son muy tóxicas y suelen contener ftalatos, que son sustancias químicas que ayudan a que los aromas duren más.  Las sustancias químicas de las fragancias, como otras sustancias químicas tóxicas, pueden pasar de la piel a la sangre.

Los gigantes de la industria cosmética y de las fragancias están invirtiendo mucho en investigación nanotecnológica, para lograr nuevos saltos en la forma de producir y aplicar perfumes y productos afines. 

El reto consiste en lograr una estrategia de conservación de fragancias más segura, con una visión natural de la aromatización, al tiempo que se proporciona una protección adecuada de la piel en las fragancias y las cremas o productos cosméticos asociados.

NUESTRA MEJORA

NANOARC Biomimetics ofrece soluciones a este problema.  Proponemos el uso de materiales no tóxicos de alta superficie, diseñados para ofrecer una superficie muy elevada y, al mismo tiempo, poco propensos a penetrar en la piel.  De este modo, se consigue una fragancia de mayor rendimiento, con menos riesgos para la salud.

Para valorar la naturaleza de nuestra oferta, en primer lugar, es importante comprender el papel de la nanotecnología en la mejora de las fragancias, con el fin de filtrar las necesidades reales de un fabricante de fragancias.

1. AROMA sostenida

Las fragancias suelen contener ftalatos, que ayudan a que los aromas duren más tiempo. Las sustancias químicas de las fragancias, como otras sustancias químicas tóxicas, pueden pasar de la piel a la sangre. 

La nanoencapsulación (sistemas de nanoentrega) implica el recubrimiento de nanomateriales con distintas sustancias, con el fin de ayudar a progresar los atributos y el rendimiento (durabilidad, estabilidad) de sustancias como las fragancias, que pueden verse afectadas negativamente por el cambio de las condiciones del entorno (por ejemplo, la luz y el aire). El uso de la nanoencapsulación en productos de fragancia ayuda a una liberación más eficaz (prolongada) y controlada en el tiempo de los aromas. 

La mayoría de los nanomateriales que se venden en el mercado tienen una superficie específica baja, lo que obliga a utilizar dosis más altas de nanomaterial para encapsular una cantidad sustancial de moléculas de fragancia. Esto afecta a la capacidad de la fragancia para lograr una liberación controlada en el tiempo y una estabilidad apreciables, y da un aspecto turbio y antiestético a la fragancia.